Cada semana tenemos que hacer un ejercicio, y algunos resultan curiosos. Uno de ellos es "SER" algo o alguien, y tenemos que escribir como si fuésemos ese objeto o ese personaje. Cuando me tocó D. Quijote, el resultado fue este. (la imagen la he sacado de Internet)
DON QUIJOTE
Me llaman Don Quijote, a mí todo un hidalgo. Me llamo Alonso Quijano, porqué me ponen un mote con lo mal que quedan los motes, eso es para la gente vulgar y yo soy un hidalgo español, con pureza de sangre. Ya me joroba el apodo ese.
A mí caballo le dicen penco. Porqué? Porque es flaquito, dónde se ha visto que los caballos gordos den más juego que el mío que me ha llevado por toda la Mancha y parte de Castilla. Si es que hablan por hablar.
Y de mi escudero Sancho, porqué le tratan de simple, si tiene toda la sabiduría del pueblo que es la que vale para manejarse por la vida. Panda de pijos que no saben de la misa la media.
Y mi amada Dulcinea?, dicen que huele a sudor, qué sabrán ellos. Ella es toda una dama y huele como huelen las señoras, siempre bien, porque si no se lavan, no se acercan a la gente y no se nota el olor. Obtusos.
Pero me gusta caminar sin rumbo por los caminos de Dios. Conocer a gente, que aunque no me entiende y se empeña en hacerme creer que los gigantes son molinos, hacen que la vida pase acompañada y no en la soledad de los campos de la Mancha.
Me gusta disfrutar de la comida con frugalidad. Un poco de queso puede ser un manjar exquisito, cosa que la gente que nada en la abundancia no puede apreciar.
Y sentirme caballero después de haber velado mis armas como procede, aunque el asunto acabara en un manteo por un malentendido, pero la noche de vela no me la quita nadie, fue de lo mejor que yo he vivido. La meditación, el sentimiento de aquella noche hace bueno todo lo que vino después. Volvería a pasar por todo con tal de vivir otra noche como aquella.
Y mis libros de caballería, rodeándome en casa, como auténticos amigos que me mostraron el camino a seguir. Si todo el mundo aprendiera de los libros todas las cosas que enseñan, seguramente mejor nos iría a todos.
Está bien eso de ponerse en la piel de otro y, sobre todo, tener empatía. Las cosas de este modo se entienden mucho mejor.
ResponderEliminarMe gustó tu escrito. Besos.
Si todos fuesemos cavalleros, otro gallos nos cantaria a "todos".
ResponderEliminarJota sí que es curioso. Y sobre todo cuando se oyen los relatos de otros. La imaginación se desborda.
ResponderEliminarEn este caso, era fácil. Se trata de una persona. Pero cuando te toca ser el zapato más viejo que tienes o la tele de casa o el portal donde se vive, ni te imaginas lo que se oye.
Es divertido.
Y muchas gracias.
Un beso
Ufff a mi me gustaría ponerme en la piel de una hormiga, no sé por qué pero siempre me gustaron...y no por lo laboriosa sino más bien porque son muy chiquititas y así me siento cuando las situaciones me superan. Oye, debo estar loca!!!!, jajaj.
ResponderEliminarMe gustó mucho
Un beso
Me encanta, creo que tienes muchisimo talento.
ResponderEliminarPakiba, sí que nos iría mejor, pero ya sabes que siembre ha habido caballeros y villanos, y desde hace tiempo, lo que yo veo es mucha mala uva.
ResponderEliminarQuizá por eso este hidalgo me caiga tan bien.
Un abrazo
Princesa, haz el ejercicio. Eres una hormiga, qué sienten las hormigas, qué harías tu si fueras hormiga... tachán... sorpréndenos y seguro que te sorprendes.
ResponderEliminarUn beso.
Bichito, ¿talento? jajaja. Qué generosa eres conmigo.
ResponderEliminarPero me alegro de que te haya gustado.
Un abrazo.
Muy buena reflexión Parker.Estaré unos días off,estoy sin internet y te escribo desde el pc de mi cuñada.
ResponderEliminarCuídate guapísima.
Morgana, pues dile a tu cuñada que te hace a tí más falta que a ella, jajajaja.
ResponderEliminarGracias bonita. Un besazo
Yo también hice un curso de escritura on line, y tenía que hacer un escrito cada semana. Fue interesante, duro y entretenido. En el que tocaba ponerse en la piel de otro lo hice en la de una mujer, una joven pintora. Tú has querido ser don Quijote y te ha salido muy bien. Enhorabuena. No dejes de enseñarnos lo que vayas escribiendo. Saludos.
ResponderEliminarJohn, no es exactamente un curso. Es un tiempo para leer, escribir, estar con gente, y los ejercicios que pone la profe yo creo que son para ponernos a prueba. Lo paso bien, es interesante.
ResponderEliminarAl menos hacemos que el coco trabaje.
Seguiré dejando alguna cosa.
Un abrazo.