Me gusta Melendi. Eso no es novedad, ya lo he dicho más veces.
Pero este verano, cuando le conocí, me cayó muchísimo mejor de lo que yo imaginaba.
Luego tuvo el detallazo de mandarme su último disco, dedicado, personalizado, con mi nombre. Como el que yo le llevé, le pedí que me lo firmara pero sin dedicarlo a nadie, por si decidía venderlo un día, creo que se quiso curar en salud. Para venderlos, ya está el.
Oigo el disco, a menudo, casi me lo sé. Me gustan las letras, el doble sentido que utiliza con tanta frecuencia, y lo que quiere decir o dar a entender, o dejar suelto.
De este nuevo, me quedo con la penúltima canción "corazón de peón".
Es una manera de explicar la vida. Una partida de ajedrez entre Dios y el Diablo. Creo que así son nuestras vidas. Somos peones, nos tratan como peones, y a un movimiento divino, sigue otro diabólico.
Aunque es una canción de amor, puede servir para todos los aspectos de la vida. Porque al final, la mayoría de las veces, alguien "me saca de mis casillas".
Y yo, por si se pudiera elegir, me pido Reina.
Pero este verano, cuando le conocí, me cayó muchísimo mejor de lo que yo imaginaba.
Luego tuvo el detallazo de mandarme su último disco, dedicado, personalizado, con mi nombre. Como el que yo le llevé, le pedí que me lo firmara pero sin dedicarlo a nadie, por si decidía venderlo un día, creo que se quiso curar en salud. Para venderlos, ya está el.
Oigo el disco, a menudo, casi me lo sé. Me gustan las letras, el doble sentido que utiliza con tanta frecuencia, y lo que quiere decir o dar a entender, o dejar suelto.
De este nuevo, me quedo con la penúltima canción "corazón de peón".
Es una manera de explicar la vida. Una partida de ajedrez entre Dios y el Diablo. Creo que así son nuestras vidas. Somos peones, nos tratan como peones, y a un movimiento divino, sigue otro diabólico.
Aunque es una canción de amor, puede servir para todos los aspectos de la vida. Porque al final, la mayoría de las veces, alguien "me saca de mis casillas".
Y yo, por si se pudiera elegir, me pido Reina.
A mí no me hace mucho tilín, también es verdad que no me he parado a escuchar sus discos y canciones al detalle, solo hablo de esas primeras impresiones a las que sometemos a todos los artistas inevitable y seguramente de forma injusta.
ResponderEliminarPero esta canción tiene razón. Somos peones, marionetas. Alguien o algo nos dirige, parece que no dependemos de nosotros para vivir, que estamos aquí por algo y/o por alguien y que estamos sometemos a una especie de gran laboratorio con sus cosas malas, horribles, buenas y buenísimas. Hasta que nuestro tiempo de experimentación se acaba, así me parece que es la vida a bote pronto, jeje.
Besos.
Hola guapísima me uno a tus gustos y aunque no tengo discos de ellos cuando los dan por radio siempre me paro a escucharlos.
ResponderEliminarBesitos.
No me suena de Melendi... ni suelo escuchar a los discos... Bueno te quería decir que cuando pases un rato puedes recoges a mi regalo de la sonrisa para todos mis seguidores y estoy encantada de que te gustará. Besos.
ResponderEliminarJota, con este muchacho pasa eso. Tiene esa pinta de colgao y esa voz que no siempre resulta agradable al oido.
ResponderEliminarYo me acostumbré a oirlo, casi a la fuerza. Pero después aprecié sus letras, su música, y ya no me cuesta trabajo, al revés, me gusta oirle. Y hablar con el personalmente, es otra cosa, de verdad que me cae bien.
Yque somos marionetas, es algo suave, porque cuando nos rompen un hilo, nos pegamos unas galletas, que ya ya.
Pero no tengo claro cual es el fin. Un día lo averiguaré, y me temo que será un corte de cuerdas total con el trompazo consiguiente.
Un abrazo
Pakiba, espero que cuando le oigas, lo pases bien. Yo llevo los discos en el coche, y cuando voy conduciendo me gusta cantar al mismo tiempo, con la ventaja de que se puede gritar al compás y nadie me oye.
ResponderEliminarUn abrazo
Noemi, aunque no escuches los discos, si quieres buscar las letras de sus canciones, seguro que te gustan. Es un tipo muy especial.
ResponderEliminarY claro que pasaré a recoger el premio, aunque tu crees que me lo merezco, de verdad? jajaja
Gracias, preciosa.
Un beso
A mi tambien me gusta Melendi, pero no me acostumbro a verlo cun su nueva imagen, me parecia mas melendy con sus rastas, no te pasa a ti?
ResponderEliminarBichoraro, que no, de verdad, Que le ví tan cerquita,como que charlamos un rato largo, que nos dimos un abrazo, y que bromeamos sobre eso, sobre su aspecto. Tiene el pelo suave, brillante, la sonrisa fácil, agradable, y que está bien, de verdad. Además tan grandote, es un espectáculo.
ResponderEliminarA mí me dan reparo los tatuajes, y hablamos de lo que dolía hacérselos, pero se está haciendo una obra de arte. Aunque a mí eso sí que no, sin ellos estaría igual de estupendo.